“Nacho Jaimes”, un personaje que no pasó inadvertido por este mundo

Su cuerpo será traído esta semana a Málaga para ser sepultado

Desde que Angie Lorena, su hija menor se fue a trabajar a México, una de las principales metas de Ignacio Jaimes Ramírez, conocido en el mundo artístico como "Nacho Jaimes", era el de ir a visitarla y de paso conocer el país de "los meros machos". Lo que seguramente Nacho no se imaginó, es que esa obsesión se convirtiera en el último viaje de su vida.

Nacho Jaimes fue un personaje de esos que no pasan inadvertidos en ninguna parte, por su personalidad abierta y sincera, la misma que le permitía vestirse de militar, de Rey, de libertador, de caballero de esos de espada y caballo, en fin, estamos seguros que Nacho Jaimes se gozó como ninguno todos y cada uno de los días de sus 63 años de vida.

Durante las festividades de Málaga no podía faltar su comparsa con carroza y guarapo incluidos, Don Quijote de la Mancha era apenas un referente para las travesuras que Nacho Jaimes se inventaba, con tal de distraer las situaciones difíciles que pudiera estar pasando él o su comunidad, lo importante es que deleitaba a todo aquel cuyos ojos chocaban con esa figura de Sancho pero estatus de gran artista cuyas manos elaboraron decenas, quizá centenares de figuras en madera, en hierro forjado o simplemente en chatarra, porque sus manos no podían estar quietas ante las posibilidades que los elementos de la naturaleza le brindaban.

Otra de las florecientes ideas de Ignacio Jaimes, (q. e. p. d.) fue la siembra de matas de plátano, café y otros, a lo largo de la calle 15, cuando el entonces alcalde Milton Suárez González no le exigió a los contratistas la agilización de los trabajos de adecuación de las redes de acueducto y alcantarillado, obligando a los habitantes de la vía nacional a convivir con el barro, el polvo y centenares de huecos por más de un año.

Su casa, convertida en improvisado museo, atestado de todo tipo de elementos, tenía un gigantesco aviso metálico en forma de media luna que decía "Palacio Municipal", hasta donde llegó más de un despistado a preguntar por el "señor Alcalde".

Cuando la tarde del pasado lunes 7 de noviembre llegó la noticia a Málaga, luego que sus hijas se comunicaron con sus demás familiares y amigos para contarles que un infarto había acabado con la vida de su padre, Málaga sintió que algo importante le faltaba y seguramente le faltará en las fiestas del próximo mes de enero.

Ignacio Jaimes había viajado a México acompañado de su esposa Olga María Rincón y sus hijas Mabel Liliana y Belky Yolima, a visitar a su hija Angie Lorena que vive y trabaja en la ciudad de Oaxaca. En Málaga solo se había quedado su hijo Mauro Alirio, quien nos confirmó que el cuerpo de su padre será traído a Málaga en unos cuatro días donde recibirá cristiana sepultura. Paz en la tumba de nuestro amigo NACHO JAIMES…

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